DIOS PROVEERÁ
Nuestro Dios creó los cielos, la tierra y todo lo que en ella hay. Al hacerlo, estableció leyes que gobiernan los tiempos y el universo. Creó al hombre y a la mujer, y los bendijo con toda bendición de lo alto para que prosperen, se multipliquen y cumplan su propósito. Han pasado los siglos, los milenios, y la bendición de Dios sigue reposando sobre sus hijos. Dios le dijo a Abram:
“Haré de ti una gran nación; te bendeciré y te haré famoso, y serás una bendición para otros. Bendeciré a quienes te bendigan y maldeciré a quienes te traten con desprecio. Todas las familias de la tierra serán bendecidas por medio de ti».” (Génesis 12:2) NTV
Mientras el pueblo de Dios se mantuvo fiel a su pacto, poniendo a Dios en primer lugar y siguiendo sus mandamientos, fueron bendecidos y prosperados. Pero en cuanto decidieron apartarse de Dios y torcieron su corazón para seguir falsos dioses construidos por el hombre, la mano de Dios también se apartó de ellos y las consecuencias fueron devastadoras.
En (1 Reyes 17:1-16) podemos ver un retrato de esta situación. Acab, rey de Israel se apartó de Dios y se fue tras los dioses falsos a los que servía su esposa, la reina Jezabel. Juntos llevaron a toda la nación a practicar el ocultismo, sirviendo a Baal y Aserá. Edificaron templos, altares y lugares de sacrificio.
Como consecuencia de ello, el juicio de Dios vino sobre la nación. El profeta Elías habló y ordenó que los cielos se cerraran y no cayó lluvia ni rocío hasta que el profeta volvió a dar la orden.
Cuando uno decide apartarse de Dios, y persiste en vivir alejado de su presencia, los cielos se cierran. El Espíritu Santo, los ángeles y la bendición de Dios también se retiran. El hombre queda librado a su propio designio, viviendo en un desierto. La persona con cielos cerrados vive en angustia y depresión. El fracaso es su alimento de día y de noche. El infierno se vuelve su pan cotidiano.
EL PODER DE LA PALABRA:
Hay poder en la palabra. Por medio de ella Dios creó el universo. Si usted tiene fe y cree lo que dice, la palabra de Dios no volverá vacía, cumplirá el propósito por la cual fue enviada. Elías habló y la naturaleza obedeció. Durante tres largos años no cayó una sola gota de agua sobre la tierra. Eso trajo una gran hambruna sobre la nación y graves consecuencias económicas, sin embargo el siervo de Dios jamás pasó necesidad. En medio de la hambruna y la sequía, Dios lo sustentaba.
“Entonces Elías hizo lo que el Señor le dijo y acampó junto al arroyo de Querit, al oriente del Jordán. Los cuervos le llevaban pan y carne por la mañana y por la noche, y él bebía del arroyo.” (1 Reyes 17:5-6)
DIOS MANDÓ A LOS CUERVOS PARA ALIMENTAR A ELÍAS:
El cuervo es un ave de rapiña, no posee la característica de compartir. Tampoco construye nidos, ocupa el nido que otra ave hizo. Sin embargo, Dios transformó la naturaleza del cuervo para servir su propósito. El Creador es quien decide, y lo que Dios quiere se cumple. Hasta lo peor del mundo Dios lo puede usar para cumplir sus propósitos.
El propósito de Dios se cumplirá en tu vida, no importa lo que las circunstancias a tu alrededor digan, aquel que es dueño de todo lo creado tiene la capacidad de revertir toda situación a tu favor.
“Luego el Señor dijo a Elías: «Vete a vivir a la aldea de Sarepta, que está cerca de la ciudad de Sidón. Yo le he ordenado a una viuda de allí que te alimente».” (1 Reyes 17:8-9) NTV
LA VIUDA:
Esta mujer tenía muy poco, solo lo suficiente para comer ella, su hijo y luego dejarse morir. Conforme a lo que Dios había ordenado, el profeta le pidió que primero le de a él de comer. Dios te está diciendo “buscad primero el reino de Dios y su justicia, y todo lo demás vendrá por añadidura” (Mateo 6:33). Nunca más faltó el pan ni el aceite en la casa de la viuda. Si Dios está primero en tu vida, la prosperidad será una consecuencia.
“Pues el Señor, Dios de Israel dice: “Siempre habrá harina y aceite de oliva en tus recipientes, ¡hasta que el Señor mande lluvia y vuelvan a crecer los cultivos!”.” (1 Reyes 17:14) NTV
Los métodos que Dios tiene para proveer son infinitos. Puede usar tanto a los cuervos como a una viuda. No importa el medio que Dios utilice, El suplirá toda necesidad.
Finalmente el profeta Elías confrontó al rey y a la reina con su pecado. El profeta oró, dió la palabra y el cielo se abrió nuevamente.
“Poco después el cielo se oscureció de nubes. Se levantó un fuerte viento que desató un gran aguacero, y Acab partió enseguida hacia Jezreel.”(1 Reyes 18:45) NTV
Se termina la sequía en tu vida, se terminan los tiempos de cielos cerrados, vuelve la presencia de Dios, vuelven sus bendiciones y su prosperidad. Amado hermano usted tiene el espíritu de Elías. El cielo respalda su vida.
Somos hijos de Dios, herederos de toda bendición de lo alto. El Dios creador de todas las cosas no dejará que nada te falte. Tendrás en abundancia, sembrarás y cosecharás al ciento por uno. Nunca te faltará el pan, ni el calzado, ni el vestido. Todo lo que esté sobre tu mesa, todo lo que pase por tus manos, será bueno y prosperarás.